Hijo de Juana y José Dolores, nació en su casa en la Calle Padre Zaldívar de El Guapo, en manos de Gregoria Blanco, conocida partera guapeña el día 8 de noviembre de 1954.
Su formación académica primaria y del ciclo diversificado la llevó a cabo en diversas instituciones educativas, entre ellas la Escuela Básica Felipe Neri de El Guapo, el Liceo Las Mercedes de Río Chico y el Liceo J.M. Escuraima Duque en San José de Barlovento.
Obtuvo el grado de Licenciado en Educación en la Universidad Central de Venezuela, también ha sido un gran investigador y promotor de lo tradicional; realizó una Maestría en Desarrollo Endógeno Cultural mediante el Convenio Cuba-Venezuela y avalado por la Universidad de las Artes de La Habana; su Tesis de Grado fue titulada: Diagnóstico sobre la Formación Musical de los Especialistas de Música en Barlovento. Destacan entre sus últimos Diplomados los relacionados a los Saberes Africanos y la Afrovenezolanidad.
En lo artístico, ha estado siempre involucrado en la defensa de las manifestaciones culturales de su pueblo; destaca como compositor, músico, inventor, actor y poeta. Para una entrevista al semanario Todos Adentro manifestó: “Aunque mi primer instrumento fue el Cuatro, me identifico más con la Bandola. Siento que cuando la toco mantengo el contacto con mis ancestros, con mi pueblo y con la gente de mi generación…”
Aprendió Piano Popular y Armonía en FundaBarlovento, bajo la tutoría del Profesor Manuel Sepúlveda.
En el año 1995 grabó el popular tema “La Tragavená”, y luego lo incluyó nuevamente en el año 2012 en lo que sería su primera y producción discográfica titulada “A mi Madre”, auspiciada por el Centro Nacional del Disco.
Ha compartido experiencias musicales con grandes exponentes del Joropo Barloventeño y de la música tradicional venezolana en todos sus géneros. En el pueblo, hace especial mención de sus antecesores: Inocencio Caraballo, Guache, Ursulino, Pablo Ruíz, Jesús Navas, Claudio Bustamante. También destaca sus inicios en el toque de Bandola con el maestro José Luis Aguiar, lo que le permitiría hasta el sol de hoy ser un autodidacta en la música.
Aunque lo conocemos mayormente como exponente del Joropo Barloventeño, también nos ha deleitado en otros géneros musicales como la Parranda y la Salsa, además de demostrar que la Bandola puede ser un acompañante ideal en muchos ritmos tradicionales. Ha llevado su música a diversos escenarios por todo el territorio nacional.
“Tuve una gran experiencia espiritual cuando fui diagnosticado con una enfermedad muy peligrosa”, aseguró Papiro en la entrevista. Además, agregó que se siente protegido por el Doctor José Gregorio Hernández y el Santo Niño de su madre, y aunque no se considera religioso guarda un gran respeto hacia estas corrientes y figuras espirituales, pues le atribuye a la Gracia de Dios estar en éste mundo “…y de paso, tocando Bandola” (risas).
Victor, o Papiro como se le conoce popularmente, aspira consolidar pronto la grabación de nuevos temas musicales para seguir compartiendo el Joropo de Bandola, Barloventeño o Pate´Perro con su gente.
Luis Enrrique Díaz
22 de Noviembre de 2022
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