Margariteño, nació en Los Millanes, el 31 de julio de 1944, en medio de una familia trabajadora, humilde, donde el sueño era el hijo graduado en base al esfuerzo y valores.
En el año 1962 obtiene el título de Maestro Graduado y en 1969 el Ministerio de Educación le confiere el título de Maestro en Educación Primaria. Luego, el Instituto de Mejoramiento Profesional del Magisterio le otorga el título de Profesor de Educación Media, mención Geografía en 1985.
A parte de su permanente actualización en el área de la docencia, su experiencia se inicia a los 18 años como Docente, ejerciendo primero como maestro normalista en la Escuela Rural de Bajo Seco (La Represa), en El Guapo, jurisdicción del Municipio Páez. Posteriormente, se desempeñó como Director del Núcleo Rural Escolar N° 272; también ejerció como docente y directivo en el Centro de Educación de Adultos “Rafael Arévalo González” y docente en el Grupo Escolar "Padre Zaldívar", en San Fernando.
La región mirandina lo hace suyo, le da pertenencia y fortaleza. Incansable, creativo, audaz; ejemplo de ello fue haber aceptado, tras su renuncia al Ministerio de Educación con 21 años de lanor en la zona rural de Barlovento, ser director nuevamente en otra región, cerca del mar, en Morón (Estado Carabobo), en la Escuela del Complejo Petroquímico Pequiven. Se encontraba frente a una realidad diferente, asumió con valentía esta nueva oportunidad.
“Emil José consagra su vida a la Educación, al servicio de dar para aprender todos. No recuerdo haberlo oído quejarse de la profesión que lo signó a través de toda su vida. Al contrario, parecía que siempre le hacía falta tiempo. El arte de enseñar lo hacía libre, porque su profesión le permitía contar cadenas de la prisión que crea en el ser humano la ignorancia. Emil utilizaba con frecuencia una frase reflexiva que condensa su filosofía de vida: No quiere más el que da, sino el que exige.”
Procurando siempre la excelencia en todo lo que hacía, alcanza a través de los cargos ejercidos los sueños de niño, las metas de adulto. “Con su ejemplo de vida demostró que se puede lograr lo que deseamos, siempre y cuando tengamos la convicción del bien común, que es el bien de todos y que esta representado por el amor. Siempre ser y hacer con base a los valores que se forjan en el seno familiar y que, al transmitirlos, los vemos reflejados en todo lo que creemos, hacemos y por lo cual luchamos”.
El Centro de Productividad Empresarial (CENPROEM) honra al maestro Emil Velásquez hoy, Día del Maestro, como ejemplo de vida e inspiración a quienes ejercen la educación con voluntad, conocimiento, valores.
Cortesía: CENPROEM @cenproem_oficial
Fuente: Nidia Velásquez, hija de Emil Velásquez.
Luis Enrrique Díaz
15 de enero de 2025
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